Es época de “vuelta al cole” y en muchos casos puedes sentir que “has perdido el tiempo” durante el verano, o que todo lo que habías progresado se ha echado un poco a perder.
Esto no es así, si sabes enfocarte correctamente en tus objetivos y no perderlos de vista aunque sean periodos de mayor inactividad en algunos casos.
Lo primero, y como hemos hablado en múltiples ocasiones, es establecer metas acorde a tus necesidades y nivel en tu momento (puedes leer sobre el tema en la web)
Si ya tienes tu objetivo claro, y tu plan de acción para conseguirlo, y sobre todo, mucho compromiso, no hay problema en que haya etapas de vacaciones o un verano de por medio para sentir que sigues acercándote a tus objetivos. Igual que hablábamos en el artículo de las lesiones, cuando no puedo hacer actividades rutinarias sobre las que trabajo para conseguir mi objetivo deportivo, por ejemplo ir al gimnasio con regularidad, seguir los entrenos específicos del deporte que practiques…Hay otras actividades que puedes realizar y así contrarrestar la “perdida” de esta, por incorporar unas nuevas que además, quizá sólo puedas hacer en verano o periodos de descanso.
Siempre puedes realizar la visualización, y seguro que en verano disfrutes de buenos paisajes o parajes diferentes para hacerlo, puedes practicar deportes de verano, realizar otras actividades, y también aprovechar para descansar.
Recuerda que para conseguir una buena meta no debes frustrarte, y no debes hacer de ella una obligación, por tanto, alejarse un poco de la rutina de tu plan de acción y sustituirlo por otras actividades, siempre teniendo en mente dónde estás, y dónde quieres llegar, acompañado de etapas de descanso, es algo fundamental para cuerpo y mente.
Lo mismo ocurre con una meta personal o profesional, el tomarte un tiempo de reflexión, recargar energía en otros lugares, y alejarte del estrés, te harán coger una carrerilla esencial para llegar a tu cima.
Por tanto, ahora que es época de “regreso” no lo veas como esa obligación de la que te hablaba hace unas líneas, míralo como una nueva oportunidad de continuar subiendo la montaña con más ganas después de haber recargado pilas y haber seguido en actividad alejado de la rutina.
No hagas de lo que te gusta y lo que QUIERES un “tengo que…” trabaja poniendo una piedrecita cada día sea desde donde sea.
Y recuerda:
“Tu Mente Es El Límite”