Si alguna vez has sufrido o sufres de ansiedad, y todo lo que ello conlleva, es posible que te suenen también las otras dos palabras,o no, y quizá estés a punto de encontrar respuesta a todas tus preguntas.
En 2004, cuando sólo tenía 17 años , comencé a ver el mundo de otra manera, todo estaba cambiado y me angustiaba mucho, no comprendía nada de lo que pasaba.Sentía como si viviera en un sueño, y las personas con las que trataba me parecían diferentes, hasta yo me sentía diferente y reflejada en otras personas. Esto me asustaba y me agobiaba hasta el punto de no querer existir, vivía triste y pensaba que nunca volvería a ser la persona de antes.
Tuve que dejar mis estudios algunos meses,no salía de casa,y me paralizaba el hecho de salir a la calle o estar sola puesto que pensaba que podría pasarme algo y que nadie vendría en mi ayuda. Comencé a ir a varios profesionales, a medicarme… y es cierto que mejoré algo, pero los «problemas» no se solucionaron.
Es por esto por lo que decidí iniciarme en la psicología, en busca de respuestas y cuando las tuviera,poder ayudar así a otras personas. Comencé a ver que existían cosas como la despersonalización y la desrealización, que todo eso que te he contado que me sucedía, y a veces me sigue sucediendo, existe, le ocurre a más personas, y que es producto de la fuerza de tu mente y de un exceso de ansiedad, un síntoma más, muy muy molesto y aterrador, pero al fin y al cabo es sólo eso: ansiedad.
Seguí formándome, encontrando respuestas, y sobre todo conociéndome a mi misma en todos estos años de experiencia profesional, y sobre todo personal. Hoy comprendo perfectamente todo lo que me ha ocurrido y me sigue ocurriendo a base de voluntad y esfuerzo. He estado diagnosticada mal, he estado tomando pastillas, y te diré que no sirven de nada, o al menos de nada mantenerlas en tu vida, que como la fuerza de voluntad,el compromiso con uno mismo, y las ganas, no hay nada.
Para vencer a la ansiedad hay que enfrentarse a ella, enfrentarnos a los monstruos de nuestra cabeza, a nuestros miedos, y ver que eres capaz de hacer lo que te propongas, y que esos miedos seguramente ni siquiera eran reales.
He salido y entrado en la ansiedad muchas veces en estos años, he llegado a no querer salir de casa, no querer conducir, no poder alejarme de la esquina de mi casa, y mucho más… y cuanto mas te conoces, más te ataca la ansiedad, pero más te enseña y más fuerte te hace cuando logras salir del nuevo episodio.
Al final, la ansiedad no es enemiga y sólo es algo que quiere decirnos algo, y se manifiesta de estas formas tan bruscas, porque no queremos escucharnos a uno mismo.
La ansiedad es un «hola estoy aquí», es un cambio que quieres hacer y no te atreves, es un miedo que no quieres admitir… y síntomas como la despersonalización o la desrealización, son eso: un molesto síntoma .
Esto tiene cura, tiene salida, y puede ayudarte más de lo que crees en tu vida.
Por qué no empezar hoy mismo,visita la sección de contacto para más info.
«Tu Mente Es El Límite»
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