
Hoy voy a hablarte de algo que seguro que te es más que conocido: tu otro yo.
Cuántas veces has experimentado un estado de enfado, estrés, desbordamiento, cobardía, ansiedad, tristeza…. y has hecho, dicho, o pensado cosas que posteriormente no te han gustado o de las que no te sientes orgulloso. Incluso has dejado de hacer cosas y después te has arrepentido.
Es entonces cuando piensas “este no soy yo”, o “no era yo”
Descubrir nuestras limitaciones, y nuestros puntos débiles es tan importante como saber nuestros puntos fuertes o virtudes como he tratado en artículos anteriores. El conocer tu lado más negativo te ayudará a conocerte y poder hacer frente a multitud de situaciones desde un marco más efectivo, y por tanto, tu entorno será más positivo, ya que el estado emocional se contagia como si de un bostezo se tratara.
Qué quieres decir con todo esto, me preguntarás… vamos a verlo desde un marco cotidiano:
Siempre me he considerado una persona ( y me considero ) valiente, luchadora, comprometida, cariñosa, capaz de dar todo, pero no todo es de color de rosa y también hay una parte que me ha limitado durante mucho tiempo, también me considero una persona miedosa, con dudas, muy impaciente, irascible incluso agresiva en algunos aspectos ( no pienses mal) Imagínate por un momento que todas estas cualidades negativas predominaran en mí más que la parte positiva… sería una persona totalmente diferente. Al yo conocer mi limitante ( esa serie de características) he aprendido a “dominarlo” o por lo menos hacerlo con más frecuencia, ya que ninguno somos perfecto. Cuando salta en mi la impaciencia, que lo hace con mucha frecuencia… soy capaz de decirme a mí misma, “Yo no soy esa”, relajarme y esperar el momento, cuando me enfado intensamente, tampoco quiero ser esa, y recuerdo “yo soy cariñosa” , cuando cojo mi moto y pienso “ voy a caerme, no puedo hacerlo” , recuerdo lo valiente y comprometida que soy y pongo todo de mi parte….podría ponerte muchos ejemplos más.
Con todo esto llego a la conclusión de que en numerosas ocasiones, nos creemos que somos toda esa lista de cosas negativas y sí, forman parte de nuestra personalidad, pero tú no eres ese limitante, esa lista de cosas negativas que todos tenemos, no hay que alimentar a nuestro “otro yo”, si no aprender de él y usarlo todo en pro de nuestro yo más auténtico y positivo, a ese si debes alimentarle y cuidarle.
Te invito a hacer una lista de cualidades positivas sobre ti, y al lado una lista de cualidades negativas. Míralas bien, por supuesto que en ocasiones saltarán esas partes negativas pero…¿ Qué quieres ser ¿ tú eliges a quien de las dos partes alimentar. Además, si alimentas tu parte más positiva, tu entorno será más positivo. Imagínate ir a una fiesta con amigos en la que todos están tristes y decaídos….¿cómo actuarías? Ahora imagínate todo lo contrario…a esto me refiero.
En numerosas ocasiones he visto como personas, tanto en la vida como en el deporte, ha alimentado su lado de inseguridad, de miedo…y han llegado a creerse ese rol, y por lo tanto a etiquetarse como tal, hay que romper con estas creencias. Recuerda, no eres “tu otro yo”
Hace unas semanas, mientras pasaba por quirófano para operarme de mi lesión de rodilla, la impaciencia me invadió, el enfado, todo parecía volverse en contra tras unas largas esperas, miedos, inseguridades….mi otro yo me estaba dominando, y yo me estaba dejando contagiar por el estado emocional de mi entorno.
Afortunadamente alguien me recordó todo lo que te estoy contando ( mil gracias a mi coach en ese momento ) y supe volver a la parte que soy y quiero ser, más fuerte, valiente y serena, y …aunque a nadie le gusta esperar 12 horas para ser operado… supe ver lo positivo de esa situación, por ejemplo poder trasmitirte todo esto en este artículo, una experiencia más como persona y deportista que ahora puedo contar a mis futuros coachees, dominar mi impaciencia, perder el miedo a la operación….y muchas cosas más que podría tirarme horas escribiendo. Además experimente totalmente ese estado de contagio emocional, si yo me calmo…mi entorno también se calma. Con todo esto quiero que veas la diferencia entre dejar que nos gobierne nuestro estado más positivo o más negativo.
Cuidado, no quiero que dejes de enfadarte, de tener miedo cuando sea necesario o de estar triste cuando haya que estarlo, si no que no dejes que tu otro yo tome la posesión de los mandos del timón.
Como deportista es igual, no debes dejar que los miedos y las dudas te asalten, ya lo he tratado en anteriores artículos, recuerda focalizarte en lo positivo y eliminar las creencias más limitantes. No es perder el miedo, es dejar que el miedo vaya al lado, no enfrente cegándonos ni detrás empujándonos a locuras.
Espero que te haya gustado y recuerda:
“Tu Mente Es El Límite”
@Sandra_Polo9